Proyecto Intendencia de Montevideo- Facultad de Ingeniería (Udelar). Entrevista a Elizabeth González y Matías Izquierdo.
En el mundo se producen anualmente 350 millones de toneladas de plástico, de las cuales se estima que entre 8 y 9 millones de toneladas, ingresan a los océanos cada año. Se estima que la cantidad de plásticos y microplásticos en la superficie del océano superar ́a las 3.5 y 2.5 millones de toneladas respectivamente para 2050 -Ritchie, Roser (2018).
Uruguay se encuentra dentro de los 10 países que más residuos de plástico generan per cápita, con 0.25 kg/persona/día- Limongi (2022).
La Universidad de la República a través de la Facultad de Ingeniería, trabaja junto a la Intendencia de Montevideo para minimizar los residuos sólidos en los cursos de agua de la capital.
Este proyecto, integra una de las líneas de trabajo priorizadas en el eje de trabajo “Ambiente” del Programa: Intendencia de Montevideo – Universidad de la República “Ing. Oscar J. Maggiolo”.
El equipo está integrado por Elizabeth González -del Departamento de Ingeniería Ambiental del IMFIA- Carolina Ramírez, Pablo Gianoli y Juan Manual Ferrés.
Las botellas utilizadas en este proyecto fueron recolectadas en la facultad de Ingeniería, y eran de un litro, de un litro y medio y de dos litros y un cuarto. González explicó a SobreCiencia que utilizar diferentes tamaños de botellas permite que la barda tenga flexibilidad y pueda adaptarse mejor a la corriente.
Paralelamente, también en Facultad de Ingeniería de la Udelar, se estudia la validación de un modelo para la detección de plásticos y microplásticos utilizando una barrera de burbujas.
Un grupo de estudiantes de grado se “enamoró” de una iniciativa holandesa, y buscó la forma de ensayarla en el IMFIA, para luego poder aplicarla en cursos de agua de Montevideo.
La “Barrera de Burbujas” es capaz de atrapar plásticos y microplásticos, utilizando una tecnología de bajo costo, muy eficiente y que no afecta el ambiente. La se forma en el agua gracias a un dispositivo que consta de un tubo en forma de L con orificios, al cual se le inyecta aire a presión. Esto que genera un flujo ascendente que oficia de barrera física para los diferentes plásticos que circulan por un curso de agua, redireccionarlos para poderlos recolectar más fácilmente.
Este es un proyecto de final de carrera de Ingeniería Industrial Mecánica de Matías Izquierdo, Renzo Carissimi y Nicolás Sabjan, siendo el tutor Alejandro Gutiérrez y la cotutora, Elizabeth González.