Durante la pandemia. El docente e investigador Ignacio Estevan dijo en SobreCiencia que los hábitos en la adolescencia en la prosecución de la pandemia tuvieron desplazamientos en cuanto al retraso en las horas debido a la cena tardía y a menores presiones a la hora de despertarse luego. Esto recae en más horas de sueño, en general.
La investigación forma parte del trabajo de la Escuela Cronobiológica de Uruguay que se encuentra abordando esta temática.
La vuelta a clases, dijo, hará que se recuperen paulatinamente “los hábitos normales de sueño”.
Por otra parte, sostuvo que la luz es un factor importante para recobrar los sentidos: “la exposición de la luz ayuda a ajustar al fotoperíodo, aumenta la tensión y pone en sintonía ciertos procesos, no lo hemos estudiado, sería interesante”.
Texto: Web de Radio Uruguay.
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