Hay al menos 42 especies exóticas invasoras en nuestro país. Entrevista a los investigadores Ernesto Brugnoli y Alejandro Brazeiro, Facultad de Ciencias (Udelar). No siempre las buenas intenciones terminan en buenos resultados. Ignorancia a veces, desconocimiento, afán de lucro o simple placer, son los motivos que fueron propiciando que los humanos introdujéramos especies exóticas en territorios que hoy se ven invadidos por ellas. Las especies invasoras son una de las mayores causas de pérdida de biodiversidad a nivel global.
En nuestro país, algunas de estas especies son un problema grave y afectan no solo a la flora y fauna terrestre y acuática, sino también a algunas actividades humanas. El listado en Uruguay registra 42 especies invasoras, entre terrestres y acuáticas
La eventual erradicación de cada especie requiere planificación y estrategias específicas.
En SobreCiencia entrevistamos a Ernesto Brugnoli (PEDECIBA Geociencias) y Alejandro Brazeiro (Instituto de Ecología y Ciencias Ambientales), ambos de Facultad de Ciencias – UdelaR.
Los científicos definieron a una especie exótica como aquella que no se originó en la región, y por una acción humana ingresa al territorio. Muchas mueren, pero algunas comienzan a interactuar con la fauna nativa y a veces tienen impacto negativo.
“La principal estrategia debería ser prevenir, generalmente cuando ingresan tienen una período de latencia, uno casi no nota efectos negativos. Cuando comienzan a crecer y hay una fase de expansión, ya es tarde, es carísimo y muy complicado”, explicó Brazeiro.
El experto agregó que se identificaron unas 350 especies exóticas y dentro de esas, se destacan como amenazantes unas 42. “De esas nosotros elegimos 12 especies, hay una diversidad enorme”, subrayó.
Los científicos dieron algunos ejemplos. Brugnoli contó que “el mejillón dorado, que proviene del sudeste asiático, está ampliamente distribuido en Uruguay. Está afectando la fauna, las tramas tróficas, pero también tuberías y plantas de potabilización hidroeléctricas”.
“El ciervo de la India, que se trajo como una especie bonita y para caza, se fue dispersando. En Uruguay no sabemos claramente el impacto, en otras partes del mundo se estudió que tiene un impacto muy fuerte en la regeneración del bosque nativo”, acotó Brazeiro.
