Entrevista al Dr. Sebastián Bruzzone (Instituto de Física -Facultad de Ciencias (Udelar) y a Amaya Moro (Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial en Baltimore -NASA). A un millón de kilómetros de la Tierra, el telescopio espacial James Webb comenzó a generar imágenes del universo y llevó nuestra mirada a lugares nunca antes vistos.
En diciembre de 2021, la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial de Canadá, lanzaron al espacio esta maravilla de tecnología considerado el telescopio espacial más poderoso hasta el momento.
El pasado 12 de julio se conocieron las primeras fotos tomadas con el Webb, que funciona perfectamente y está disponible para ser usado por la comunidad científica internacional que así lo solicite.
Para conocer detalles de sus características y analizar las primeras fotografías conocidas, SobreCiencia habló con la astrónoma española Amaya Moro, una de las primeras científicas que vieron las imágenes del James Webb Space Telescope. Moro trabaja en el Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial en Baltimore, de la NASA, trabaja en la interface entre los astrónomos usuarios y la parte técnica del telescopio, monitoreando el funcionamiento de los instrumentos y estableciendo reglas para usarlo. Además se dedica a la selección de propuestas de investigación.
“James Webb es absolutamente extraordinario. Nos va a permitir hacer descubrimientos inesperados“, expresó Moro.
En estudios recibimos al doctor en Astronomía Sebastián Bruzzone, ex investigador en NASA Goddard Space Flight Center, Instituto de Física (Facultad de Ciencias) e Instituto de Profesores Artigas (IPA).
Bruzzone dijo a SobreCiencia que las primeras imágenes del James Webb demuestran la capacidad de resolución del telescopio y lo sensible que es.
“En algunos puntitos píxeles para las galaxias más lejanas, estamos hablando de cientos de miles de años, y agregó que “estamos obteniendo imágenes de las primeras galaxias que se formaron en el universo“.