Islandia encontró cómo canalizar sus excedentes de energías limpias a partir del fomento de la instalación de plantas productoras de aluminio. Sigríður Andersen es parlamentaria desde 2015 por el Independence Party de su país, de tendencia conservadora. En Madrid, integra una comitiva de parlamentarios de países nórdicos, quienes lideran las iniciativas ambientales en sus respectivos legislativos.
Islandia tiene fuertes puntos en común con Uruguay, tanto en la fuerte presencia de energías renovables en su matriz como la importante generación eléctrica, lo que produce excedentes que se colocan en mercados externos de diferentes maneras.
Islandia, igual que Uruguay, genera electricidad en exceso. Pero: ¿cómo exporta electricidad una isla que no puede conectarse físicamente con otros países, que no tiene fronteras terrestres?
Por ejemplo, favoreciendo la instalación en su territorio de industrias de alta demanda de energía y exportando esa producción. Es decir, induciendo mediante políticas dirigidas la instalación de unidades de producción que, al final del proceso, exportan esa energía ya incorporada a sus productos.
Este fue el caso de Islandia, que encontró cómo canalizar sus excedentes de energías limpias a partir del fomento a la instalación de plantas productoras de aluminio, mientras evalúa conectarse físicamente con las islas británicas para comenzar a exportar electricidad a través de un cable submarino.
Pero hay otras maneras de exportar energía. Por ejemplo, vendiendo sol a los países que no lo tienen en cantidad suficiente. Chiyoda Corporation es una de las empresas que está exponiendo en el stand de Japón, una de las naciones que cuenta con su propio espacio en la COP.
Chiyoda ha comenzado a construir en la península arábiga una enorme planta fotovoltaica, pero no para abastecer de electricidad a los países árabes, sino para exportar energía de manera innovadora: transformada en hidrógeno.
La idea de Chiyoda es aprobar ese excedente de sol y transportarlo, primariamente a Japón, convertido en hidrógeno, que funcionará como combustible para motores y celdas de combustible.
Mientras tanto, el consorcio Mitsubishi – Hitachi ya está diseñando maneras de aprovechar ese hidrógeno, alimentando usinas generadoras de energía que no son diferentes a las centrales térmicas que tenemos en Uruguay, por ejemplo la recientemente inaugurada Central de Punta del Tigre.
De hecho, Mitsubishi ya tiene un generador de 440 MW funcionando en Holanda, donde produce electricidad a partir de una mezcla de 30% de hidrógeno y 70% de gas natural.
Katsuki Nishioka, gerente senior del consorcio Mitsubishi Hitachi lo explicó de esta manera.
Este 12 de diciembre en Uruguay, Ancap presentará a dos expertos de origen español, especializados en procesos vinculados a generación y aprovechamiento de hidrógeno, seguramente orientados al ya conocido proyecto Verne, que apunta a transporte de cargas en medianas y largas distancias. Aprovecharlo para la generación eléctrica puede ser una interesante derivación.
Fridays for future
Es una organización que se ha metido de lleno en las agendas climáticas de todo el mundo Fridays for Future y ha estado presente durante toda la COP25 en Madrid. Este miércoles 11 de diciembre, unos 50 huelguistas climáticos subieron al escenario después del evento de alto nivel sobre emergencias climáticas para mostrar su enfado por la ausencia de una acción climática suficiente.
La acción fue planeada y organizada por huelguistas climáticos de todos los continentes. Fue organizado en apoyo de Greta Thunberg, quien habló en el evento antes de la acción organizada.
Escuchar a María Serra Olivella, fundadora de FFF Barcelona.
Texto: Web Radio Uruguay