Entrevista a la ingeniera Fiorella Haim, gerenta general del Plan Ceibal, y Premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga y Científica (2021).
Hace 15 años, más precisamente el 10 de mayo de 2007, se ponía en funcionamiento de uno de los proyectos más ambiciosos del Uruguay moderno: el Plan Ceibal.
Todo empezó en Cardal, departamento de Florida, con las recordadas XO; aquellas notebooks verdes y blancas, que parecían de juguete y que, sin embargo, abrieron ventanas al mundo.
Ceibal hoy va mucho más allá de la entrega de una computadora a cada estudiante: es una caja de herramientas llena de utilidades que alcanzan a niñas, niños y jóvenes en todos los niveles de la educación y que no distingue entre público y privado o entre Montevideo e interior.
Para hacer un repaso de estos 15 años, entrevistamos en SobreCiencia a Fiorella Haim, gerenta general del Plan Ceibal, que estuvo presente en esta iniciativa desde el primer día.
“La primera etapa de 2007 a 2009 fue de un despliegue masivo, entregamos máquinas y conectividad a todo el interior y al final a Montevideo. La computadora era una puerta al mundo”, contó Haim.
Ceibal entregó 2.581.377 de equipos entre 2007 y 2021, llegando al 100% de estudiantes y docentes de Educación Primaria y Media Básica. El 68% de estudiantes de menores ingresos de Educación Primaria y Media tienen únicamente una computadora de Ceibal.
De 2007 a 2019, el acceso a una computadora en estudiantes de 6 a 13 años subió de 30 % a 90 %.
Pero Ceibal hoy va mucho más allá de la entrega de una computadora a cada estudiante: es una caja de herramientas llena de utilidades que alcanzan a niñas, niños y jóvenes en todos los niveles de la educación y que no distingue entre público y privado, o entre Montevideo e interior, y también le ha tocado jugar un papel fundamental en la educación durante la pandemia.
“Por suerte pudimos dar una buena respuesta en la pandemia. Tuvimos un incremento en los requerimientos de infraestructura, que logramos ampliar. Hay varios estudios regionales que muestran que tener esta herramienta mitigó los efectos de la pandemia”, dijo la entrevistada.
Haim contó que hoy en nivel inicial entregan tablets en modalidad biblioteca, que se utilizan en la escuela. En primero de escuela reciben su tablet, en tercero la cambian por una laptop y en primero de Secundaria o UTU recambian por una tablet de 10 pulgadas.
“La orientación, el cómo y el para qué tiene que provenir del adulto. Muchas veces ver lo que lograban a través del interés que generaba en los chiquilines, motivaba a los docentes a probar otras cosas y a animarse”, expresó.